LA BATALLA DE MIS OJOS
Los ojos que me miran frente al espejo
no son sólo mis ojos
son una incógnita que viene de lejos
un límite inquietante
que avanza según su antojo
en esta noche amenazante.
Los ojos con los que miro el mundo
me acompañan con su torpeza
curiosos, obstinados y desafiantes.
No dudo ni por un segundo
del valor de su grandeza
cuando siguen mirando hacia adelante.
VOLANTIS
Ondulaciones doradas
impulsos de luz
midriasis del pensamiento.
Volutas voluptuosas
sobre el techo de mi inconsistencia.
Volátiles adornos,
fantasmas fugaces de mi presencia.
Pasajeras inquietudes que se lleva el viento.
UNA MAÑANA SOLEADA
Una mañana soleada invita al mar.
Ya se sabe de memoria el camino
por la carretera estrecha y ventosa
baja veloz hacia el salado destino.
Una mañana soleada invita a dejar
las preocupaciones dentro del bolsillo.
Pasear por las aceras, vaporosa,
como un globo perseguido por un chiquillo.
AZULES
Los azules me tientan,
me persiguen con sus gamas infinitas,
en la ropa, en las flores,
en la carrocería de los coches.
El destello azul de una llama,
un esmalte de uñas, un olor azul.
La infinita línea del mar y su horizonte,
la tinta de un bolígrafo,
unos ojos que me miran,
un amargo licor.
Beber los azules del cielo y del agua
despacio, a partes distintas,
mezcla de refugios y silencios.
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