miércoles, 2 de mayo de 2007

POEMAS A NADA (1997)

POEMAS A NADA




LA NADA

Ah, la nada,
ese vacío insonoro
que no es nada y lo es todo a la vez.
Ese esperar lo imposible
y tocar lo intangible,
caer despacio y caer otra vez.

Nada es nada.
Nada tiene sentido
si no hay un vacío
en donde se distinga la materia.
Nada son los sentimientos
y los sueños,
nada es esta lluvia sobre la tierra.
Nada somos algo de nosotros.




ESPERANDO NADA

Tras el lado oculto de las cosas
vives escondido.
Apenas habré podido adivinar
el brillo de tus ojos
entre la ciega multitud.
Basta ya de ídolos,
no quiero nada sobre un pedestal de nubes
que acabe deshaciéndose
y cayendo sobre mí.

Vienes, te vas,
te presentas como en un relámpago
y desapareces rápido
como la cordura en un loco.
Mi melancolía no tiene fuerzas


para buscarte en estas tardes tristes
de suelos mojados y horizonte gris.
Sólo los sueños infinitos
son mis compañeros de almohada cada noche.
Perdida la inocencia
no cabe esperar nada
porque, precisamente cuando nada se espera,
es cuando la vida
se vuelve pródiga con una misma.




NADA JUSTIFICA LA VIOLENCIA

El miedo no justifica la violencia
ni tampoco el poder.
Nada justifica la violencia
pero la paz sigue siendo invisible
a los ojos ciegos del dinero.
Hay ciudades con un lazo azul
que es sólo tela a los ojos
de aquellos que emplean la violencia
para justificarse.
Hay sangre por las calles
de aquellos de piel oscura
que han comprado armas
a los blancos del norte.
Hay miles de estudiantes
en Sudamérica y en China
que no quieren más cerrar la boca
pero todo intento pacífico,
toda fe es poca
y sin embargo,
nada de eso nos justifica
el uso de la violencia.




SIGUIENDO NADA

No vale la pena sentirse triste
cuando la tristeza misma está en el cielo,
en la tierra, en el agua,
en el barro, en los demás.


No vale la pena ser como los otros,
ocultarse bajo sus mismas máscaras
y fingir no saber nada.

¿Vale la pena llorar
por el daño que nos han hecho?
¿Acaso consolamos
a quién llora nuestros errores?

Un cielo gris, un horizonte eterno
¡ y andar ... andar ! ...
¿Vale la pena quejarse
por lo que está mal hecho
para luego olvidarlo todo
y no volver la vista atrás?

Ni siquiera los otros con sus máscaras
han inventado un antídoto
contra lo que les hace mal,
¿merece la pena seguir el mismo camino?




SANGRE PARA NADA

Hoy ha caído derramada más sangre inocente
en manos de la ira y de la ambición.
El poder y la libertad se corrompen
cuando manos sucias ofrecen dinero.

No hay castigo aparente,
ellos mismos se ahogan
con el nudo de sus corbatas
y con los ácaros que cubren
los libros de sus leyes,
ésas que llaman poder del pueblo
y que son todo, menos actos de justicia.

Seguirán cayendo uno tras otro
como ratas
y algunos dentro de su propia trampa.
Lo mejor será
no fiarse de nadie
y poner la cabeza a cubierto.


El fútbol nos nublará las conciencias
y los pocos obispos que quedan
trataran de convencer a las masas
(tristes ancianas de negro
que se sientan tras una vela),
con sus palabras de amor y bondad.
¿Le importará acaso a Dios la política?

Hoy ha corrido sangre,
probablemente mañana o pasado
correrá más.

Y los periódicos y las televisiones
criticarán lo que en el fondo apoyan.
"Ojo por ojo, diente por diente,
pero a los míos que no los toquen,
- dirán algunos - que yo no he abierto la boca"

Y así pasarán diez años más
si no se "arma la de Dios",
cosa también incierta.

Atrás quedaron las utopías,
hoy sólo hay corrupción,
dinero y mierda.




AMANDO NADA

Me siento bloqueada, algo me aturde,
Esta agonizante soledad que me hace soñar
con fantasmas doloridos y voluptuosos me agobia.
Allá en el fondo de mis sueños
existe un cuerpo caliente
que se deja acariciar por mis frías manos.
Su pecho, su vientre, sus muslos,
todo en él ha sido trabajado
con interminables horas de esfuerzo físico
y pasea insolente su desnudez masculina
por delante de mi desconsuelo
y su mirada es inerte y fría,
pues no hay sentimientos para mí
detrás de sus oscuros ojos
y sus pobladas cejas latinas.


Y yo invento que él me ama y me hace suya
y luego despierto de un vasto sueño
y vuelvo a la vida, esta oscura pesadilla
donde no hay besos, miradas o caricias ;
sólo sábanas frías, un despertador que suena
y otra jornada más.



POR FIN ... NADA

Anoche lo vi.
Hacía más de tres meses
y lo veo igual de feliz
como otras veces,
tan tranquilo,
pasando de mi.

Y apenas le di importancia,
¡cómo he cambiado!

Parece que ahora soy libre,
pues ese capricho tonto
por fin he matado.

Me costó tanto tiempo aceptar
la idea de que estaba equivocada
que ahora me reprocho el estar
tanto tiempo esperando nada.

Ah, ya pasaron mis extravagancias
que tanto rubor me han causado.
Sí ya me siento libre,
porque este delirio tonto
por fin se ha acabado.


FIN

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